martes, 11 de febrero de 2014

De empleado a empresario...validando el modelo de negocio

En esta 3ra. ronda de la serie "De Empleado a Empresario", quisiéramos tocar un tema que parecería muy obvio, pero que en la práctica no lo es; convirtiéndose en una de las  principales causas para que muchos negocios fallen.

Es muy frecuente y normal tomar la decisión de emprender en aquello en lo que tenemos alguna experiencia o conocimiento técnico.  Nos parece obvio que como sabemos de lo que vamos a hacer, todo va a funcionar bien; pero nunca nos tomamos el chance de mirar hacia afuera y poner a prueba nuestra idea de negocio. Pero más aún, el conocimiento de la parte técnica del negocio no incluye el conocimiento de cómo manejar la empresa, sobre todo si se emprende por primera vez.

El que conozcas cómo se hace el producto o servicio que ofreces, no garantiza que podrás venderlo, tampoco garantiza que quieran comprarlo! Cuando abrimos una empresa, nos toca conocer sobre lo técnico, sobre lo administrativo y sobre lo gerencial, pero además sobre lo comportamental...todo eso implica tener el rol de empresario.  Generalmente lo que está en planes en nuestra mentalidad de empleado, dista mucho de la realidad como empresario. Nueva vez, si te concentras solo en lo técnico, sigues siendo un empleado de tu negocio, no un dueño de negocio.



Lo otro es el ser capaz de salir a poner a prueba tu idea al mercado, preguntar a los potenciales clientes y recibir retroalimentación sincera sobre si realmente existe una necesidad del negocio que quieres hacer; sin apasionamientos, abierto a ajustar, a hacer cambios, moverte de mercado e inclusive, cambiar de idea.  Donde no hay una necesidad o problema que resolver, no hay negocio!

“La falta de oportunidades lleva a mucha gente a pensar 
en el emprendimiento como una solución de autoempleo, 
por eso proliferan los autónomos y las microempresas”

...y yo agrego: y por eso la mayoría cierran 
antes del 1er. año y en el mejor de los casos, no crecen! 

Que nuestra idea de emprender no sea motivada tanto por la necesidad, sino más bien por la oportunidad.  Solamente los clientes nos pueden decir si hay una real oportundidad, si sonará la caja registradora, si hay potencial de crecer y no solo de ganarme lo mínimo para subsistir.  Si validada esta información todavía la respuesta es positiva, entonces nos toca aprender y emprender!!



Estás list@ para ser empresari@? ... se aprende haciendo!!


 Xiomi

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