viernes, 8 de septiembre de 2017

Cómo anda tu Locus de Control?

Hace unos días, mientras impartíamos un taller sobre los nuevos estilos de liderazgo que requieren las organizaciones hoy en día, un participante apelaba a varios argumentos, todos externos a él, que le hacían entender que nada de eso le iba a dar resultado: la cultura de la organización, la demás personas no responden a eso, el sistema no ayuda, etc. etc.

Ante la actitud del resto del grupo que no entendía el por qué de su resistencia si todos eran miembros de la misma institución, aprovechamos para reflexionar sobre el Locus de Control.  Me sorprendió que muchos no conocieran el concepto, así que decidí compartirlo también con ustedes.


Se define como Locus de Control:

"término psicológico que hace referencia a la percepción que tiene una persona acerca de dónde se localiza el agente causal de los acontecimientos de su vida cotidiana. Es el grado en que un sujeto percibe que el origen de eventos, conductas y de su propio comportamiento es interno o externo a él."

De ahí que todos tenemos:

LOCUS DE CONTROL INTERNO: percepción de que los eventos ocurren principalmente como efecto de nuestras propias acciones, de que tenemos el control de nuestra vida. Valoras entonces positivamente el esfuerzo, la habilidad y responsabilidad personal.

LOCUS DE CONTROL EXTERNO: percepción de que las cosas nos ocurren como resultado de la suerte, el destino o el poder y decisiones de otros. Entendemos que los eventos no tienen relación con el propio desempeño, es decir, que los eventos no pueden ser controlados por esfuerzo y dedicación propia.  En esta parti atribuímos méritos y responsabilidades principalmente a otras personas.


El estado "ideal" sería aquel que nos permite valorar de manera objetiva qué tanto he contribuido yo o no a los resultados que obtengo (Locus de Control Interno), teniendo claro que los resultados de las situaciones surgen como una combinación de nuestra aportación así como de otras muchas variables implicadas que escapan de nuestro control (Locus de Control Eterno). Es un equilibrio entre ambos, pero siempre comenzando en evaluarnos primero a nosotros con pensamiento positivo y constructivo. 

Muchas veces hay realmente factores externos que afectan los resultados.  Luego de reconocerlos, es importante moverte de inmediato a la parte interna y preguntarte: cómo puedo asumir o qué puedo hacer diferente ante esta situación para mejorar mis resultados?  Basarnos en solo uno de los dos Locus de Control disminuiría la posibilidad de mejorar los resultados y nuestro estado de ánimo ante las situaciones.

En cuál de tus Locus de Control andas más? espero ver tus comentarios en las redes: @xiomifrias


                                                                                           Xiomi